En el contexto de la reestructuración acelerada de la combinación energética mundial, las bombas de calor están puestas con grandes esperanzas. Para Europa, esto no se trata solo de construir eficiencia energética, sino más bien de cómo descarbonizar y liberarse de la dependencia estructural de la energía fósil.
Sin embargo, los últimos datos de la Asociación Europea de Bombas de Calor (EHPA) muestran que en 2024, el volumen de ventas de las bombas de calor en los principales países europeos se redujo en 21% año con año. Con mercados centrales como Alemania y Bélgica reduciéndose significativamente. Alemania, una vez considerada como un "modelo de transformación verde", también se vio obligada a hacer retroceder sus políticas debido a la controversia causada por la política de "Prohibición de las calderas de gas". La gente no puede evitar preguntar: ¿Las bombas de calor, que alguna vez fueron ampliamente optimistas como una solución baja en carbono, realmente han llegado a un punto de inflexión?
La EHPA señala que esta ronda de declive no se debe a la tecnología en sí, sino a la superposición de múltiples presiones: l Los ajustes en el ritmo de las políticas han socavado la confianza del consumidor; l La inflación y la debilidad económica han presionado el gasto de los hogares; el costo de la electrificación sigue siendo alto, Lo que dificulta la formación de un atractivo de precios efectivo.
Tomemos al Reino Unido como ejemplo: Actualmente, el precio medio de la electricidad es aproximadamente 3,5 veces mayor que el del gas natural, y en Alemania, esta brecha es incluso hasta 3,7 veces. Las ventajas de las bombas de calor en la eficiencia energética se compensan con los costos en el lado operativo. Junto con la alta inversión en instalación inicial, muchos hogares han optado por esperar y ver entre "Visión" y "realidad".

Esto no significa que las bombas de calor como tecnología misma estén siendo anuladas; más bien, el mercado europeo está pidiendo una solución sistemática que sea más entregable y rentable.
En marcado contraste con los altibajos del mercado europeo, China se perfila como la fuerza más incremental y segura en la cadena mundial de la industria de bombas de calor.
Según las estadísticas de la AIE, en 2023, la capacidad total de exportación de las bombas de calor de China superó los 10GW, lo que representa aproximadamente la mitad del total mundial; los costos de fabricación son generalmente 40%, 60% más bajos que los de los mercados europeos y estadounidenses, y China tiene aproximadamente el 95% de la capacidad de producción mundial del compresor de bomba de calor. Más importante aún, la industria de bombas de calor de China no solo ha logrado ventajas de escala, sino que también continúa logrando avances en tecnología, integración de sistemas y entrega de cadena completa.

En esta cadena de valor, AMITIME es sin duda un representante típico. Desde exportar su primera bomba de calor de fuente de aire a Noruega en 2003 hasta vender productos en más de 70 países y regiones en todo el mundo, AMITIME ha abierto una "ruta de actualización de fabricación" diferente de la mayoría de las empresas OEM:
Investigación y desarrollo independientes en Tecnología: diseño prospectivo de refrigerante respetuoso con el medio ambiente R290, que domina tecnologías clave como la anti-fuga de microburbujas;
Capacidades sistemáticas: investigación y desarrollo independientes de tanques de agua, máquinas completas y control de la nube, dominando el núcleo de algoritmos y gestión de la eficiencia energética;
Certificaciones internacionales: aprobó múltiples estándares estrictos como Keymark, MCS y ETL, con la capacidad de implementar proyectos transfronterizos;
Igual énfasis en el costo y la EffiCiencia: Una fábrica altamente integrada verticalmente garantiza la velocidad de entrega y una calidad constante. Es precisamente por estas razones que IKEA, al lanzar bombas de calor de fuente de aire en Alemania, eligió AMITIME para proporcionar soporte de fabricación central. Esto no es solo una cooperación, sino también un respaldo en profundidad de las capacidades de fabricación de bombas de calor de China.
La historia no siempre se desarrolla entre aplausos. En cierto sentido, la vacilación temporal hacia las bombas de calor en el mercado Europeo ha ofrecido precisamente a la industria mundial una oportunidad para una observación tranquila:
-Si las bombas de calor realmente pueden reemplazar las calderas de gas natural no depende del avance de la tecnología, sino de la capacidad de entrega y la eficiencia del sistema;
-La competitividad de las empresas de bombas de calor ya no se limita a una sola pieza de equipo, sino que se refleja en capacidades de cadena completa, como la integración de la cadena de suministro, la optimización de algoritmos, y operación remota y mantenimiento;
-La próxima ronda de popularización y crecimiento ya no dependerá únicamente de la promoción de políticas, sino más bien del juicio racional de los consumidores sobre la "relación precio-rendimiento".
En este contexto, las empresas chinas, aprovechando sus ventajas completas de integración de sistemas y bases de fabricación, se están convirtiendo en una variable clave en la remodelación de la confianza en la industria de las bombas de calor.

Desde la fabricación de equipos y diseños originales hasta asociaciones globales; desde la exportación de equipos individuales hasta la entrega general de sistemas; Amitime está recorriendo un camino de transición de la fabricación a la mejora de valor.
Con tres bases de fabricación inteligentes en Zhongshan, Shunde y Turquía, Amitime ha construido una red de suministro de bombas de calor para el mercado global a través de sistemas de producción automatizados, digitales y flexibles.
De cara al futuro, Amitime está expandiendo continuamente la influencia de su marca y los límites tecnológicos, esforzándose por pasar de "hacer buenos productos para los clientes" a "definir la vida para los usuarios". Amitime está dispuesta a trabajar con socios más globales, con la tecnología como ancla y los usuarios en el centro, para impulsar la industria de las bombas de calor hacia un futuro más económico, más limpio y más inclusivo.